10 rue des Minimes, 63000 Clermont-Ferrand
Al doblar una calle peatonal del centro histórico, una fachada discreta atrae la atención tanto de los habituales como de los viajeros curiosos. El Dav’Hôtel Jaude, aunque enclavado en una atmósfera tranquila, está plenamente integrado en la vida animada de la ciudad. A menos de dos minutos a pie de la plaza de Jaude, permite acceder caminando a tiendas, restaurantes, transporte y lugares culturales. Esta céntrica ubicación le ahorra desplazamientos innecesarios y lo sitúa en las inmediaciones de todo lo importante.
Desde la entrada, el hotel sorprende por su estilo. Aquí, nada está estandarizado. Una asesora en decoración ha imaginado un universo colorido y lúdico, que rompe con la uniformidad que a veces se encuentra en este tipo de alojamiento. Cada piso, cada rincón revela una intención decorativa intencionada. Descubrirá un diseño urbano salpicado de tonos vivos, contrastes fuertes y objetos elegidos con cuidado, creando un ambiente a la vez cálido y singular.
Las 28 habitaciones ofrecen un confort bien pensado, con especial atención al espacio y la insonorización. Ya sean con vistas a la calle o a la parte trasera del edificio, brindan una atmósfera propicia para el descanso, ya sea tras un día de trabajo o de exploración. Algunas han sido completamente rediseñadas con un espíritu artístico, con toques de humor y audacia que agradablemente se desmarcan de los códigos hoteleros clásicos.
Todas las habitaciones están climatizadas y cuentan con un baño equipado con ducha o bañera. La conexión Wi-Fi es gratuita, al igual que el acceso a canales televisivos a través de una pantalla plana. Los materiales elegidos, los colores y la configuración general varían de una habitación a otra, reforzando la sensación de personalización que caracteriza toda la experiencia.
El establecimiento pone especial empeño en facilitar su llegada. Se ofrece una fórmula de llegada tardía si se avisa al equipo antes de las 22:00. La recepción es flexible y reactiva, con un servicio de conserjería disponible para responder a sus solicitudes, ya sea que esté en un viaje de negocios o de turismo. También se dispone de un servicio de salida exprés para quienes tienen prisa.
Por la mañana, el desayuno se sirve en una sala con una decoración tan alegre como las habitaciones. El buffet se destaca por la calidad de su selección, combinando productos regionales y delicias clásicas. Encontrará queso de Auvernia, jamón, mermeladas artesanales, miel local, pero también yogures orgánicos, compotas, frutas frescas, bollería, tortitas, bebidas calientes y frías. Una generosa selección a un precio razonable, con gratuidad para los niños menores de seis años.
Las familias encontrarán aquí un alojamiento flexible. Los niños menores de dos años pueden dormir gratis en la habitación de los padres, y se dispone de una cama supletoria bajo solicitud. Las mascotas también son bienvenidas sin costo adicional, algo que sigue siendo poco común en el centro de la ciudad.
El Dav’Hôtel Jaude también está dirigido a viajeros de negocios, con una fórmula de noche de etapa en asociación con restaurantes cercanos. Estos, accesibles a pie, permiten combinar comidas de calidad y alojamiento sin pérdida de tiempo.
Para el estacionamiento, el establecimiento ha negociado una tarifa ventajosa con el parking Vercingétorix, situado a unos cien metros. Solo tiene que solicitar un cupón en la recepción para beneficiarse de una tarifa reducida por noche o por día. Un detalle apreciable en esta zona céntrica que a menudo no está diseñada para automóviles.
El hotel es completamente para no fumadores y está equipado con un ascensor, lo que facilita el acceso a los pisos superiores. Aunque el establecimiento no cuenta con servicios como un gimnasio o una piscina, lo compensa ampliamente con su ambiente animado, su ubicación estratégica y su sentido de la hospitalidad.
Alojarse en el Dav’Hôtel Jaude también significa disfrutar de una ubicación ideal para descubrir Clermont-Ferrand a pie. A pocos minutos caminando, podrá visitar la majestuosa catedral de Notre-Dame-de-l’Assomption, un edificio de piedra de lava negra con un impresionante estilo gótico. Alrededor, las calles empedradas del casco histórico revelan edificios antiguos, tiendas locales y terrazas animadas.
El Jardín Lecoq, un poco más abajo, ofrece una agradable pausa verde con sus grandes prados, su estanque y sus esculturas, perfecto para un paseo o un momento de descanso. Para los amantes de la cultura, el museo de Arte Roger-Quilliot, en el barrio de Montferrand, merece una visita por sus variadas colecciones que van desde la Edad Media hasta el arte moderno.
Los más curiosos pueden subir hasta la cima del Puy de Dôme, accesible en tren panorámico desde las afueras de la ciudad. Una vez en la cima, la vista de la cadena de los Puys es impresionante. También es un buen punto de partida para senderismo o iniciación al parapente.
Por la noche, los restaurantes cercanos al hotel permiten descubrir los sabores locales: truffade, aligot, embutidos de Auvernia o quesos con carácter como el Saint-Nectaire o el azul de Auvernia. El barrio de Jaude está lleno de pequeños lugares que mezclan cocina tradicional e inspiraciones contemporáneas.
Si su estancia coincide con uno de los numerosos eventos organizados en Clermont-Ferrand, como el Festival Internacional de Cortometrajes, Europavox o los encuentros literarios, la ubicación del hotel le permitirá acceder a ellos muy fácilmente, sin restricciones de transporte ni de tiempo.
El Dav’Hôtel Jaude no se contenta con estar bien ubicado: asume una identidad afirmada, original y accesible. Apostando por una atmósfera desenfadada pero cómoda, ofrece un punto de encuentro animado, funcional y acogedor, donde cada estancia tiene un toque ligeramente diferente. Una dirección a considerar si busca algo más que simplemente un lugar para dormir.
Actividades
General
Servicios
Varios
Desde 60 EUR por noche